Hoy nos llegó una máquina de hacer chapas para el CAI, ésta es propia la compró la fundación para que podamos diseñar y hacer nuestras chapas. Si recordáis hicimos algunas en el marco de la Cooperativa ArteVill@ con una que nos prestó el CMU por unos días. Las vendimos en el mercado de cooperativas. Nos gustó la actividad. Así que le trasladamos a la dirección del centro que nos gustaría contar con una propia para poder hacer más, innovar en diseños, y ser más creativos/as. Se trasladó la petición a gerencia, y … ¡ ya tenemos máquina!. Así da gusto ya podemos desarrollar más “capacidades creativas”. ¡Muchas gracias! por ocuparte Rolando.
Aquí nos veis, a la izquierda Boniel, en el centro Samy, una compañera nueva, y yo. Samy no tuvo la oportunidad de trabajar con la que nos prestaron, así que le explicamos un poco por encima cómo funciona.
En el centro José, otro compañero de reciente incorporación.La estrenaremos el día de la discapacidad para hacer allí un taller en vivo. Haremos muchas, muchas chapas con el objetivo de concienciar a la sociedad de las capacidades que tenemos y cómo no de las limitaciones propias e impuestas. Como son un complemento que mucha gente lleva, pretendemos con ellas sensibilizar y hacer reflexionar a la gente sobre las barreras, tanto físicas como sociales, que cualquier persona puede encontrarse en su vida cotidiana, independientemente de que tenga o no discapacidad.
Texto: Merce M.B.
Fotos: Enol
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